Registro de Marcas

Es importante señalar que cuando se inicia un negocio y se le asigna un nombre (marca) o logotipo que lo describa, estos no serán de propiedad de quien los asignó, por lo que perfectamente puede aparecer otra persona emprendiendo un negocio y utilizando el mismo nombre e incluso logotipo para caracterizarlo. Por lo tanto, si usted desea ser único dueño de la marca y ser quien ostente el prestigio de la misma, deberá realizar el registro marcario.

Por otro lado, usted siendo dueño de su marca podrá oponerse en un futuro a eventuales terceros que quisieran inscribir marcas idénticas o similares a la suya. Incluso podrá oponerse a quienes, sin su autorización, utilicen su marca o logotipo.

Por marca comercial entendemos todo signo utilizado para distinguir en el mercado productos, servicios, establecimientos industriales y comerciales.

En Chile, podemos registrar como marca comercial todo signo de representación gráfica, especialmente las palabras (tengan o no un significado), nombres de personas, letras, números, imágenes, gráficos, símbolos, combinaciones de colores, así como también la combinación de alguno de estos signos.

También puede registrar las frases de propaganda o publicitarias, siempre y cuando estas vayan unidas a una marca ya registrada.

Al registrar una marca se podrá obstaculizar intentos desleales de terceros que quieran utilizarla o afectar su prestigio. Además, será posible ejercer:

– acciones penales en contra de ellos, por uso malicioso.

– acciones civiles de indemnización de perjuicios por uso no autorizado de la marca.

– acciones o demandas de oposición a solicitudes por parte de tercero de registro de marcas idénticas o similares a la ya registrada.

Cabe señalar también que se podrá autorizar a terceros a utilizar una marca registrada mediante contratos de licencia.

El valor establecido a pagar es de 3 UTM por cada clase a registrar. Si se desea registrar una marca con más de una clase, se deberá pagar 3 UTM por cada una, es decir, se considera como que se estuviese registrando 2 o más marcas.

El pago se realiza de la siguiente manera: al inicio de la tramitación se requiere pagar 1 UTM (por el hecho de presentar la solicitud de marca) y las 2 UTM restantes sólo se cobrarán en el caso de que la marca sea concedida. Por otro lado, de rechazarse el registro de marca, la UTM pagada en principio quedará a beneficio fiscal.

Si bien no se requiere de contratar un abogado para realizar el registro, hay ciertas actuaciones (eventuales) en las que sí se necesitará de un abogado que lo represente. Por ejemplo, en el caso de que durante la solicitud de registro INAPI realice observaciones a su marca, solo por medio de un abogado se podrá responder dichas observaciones. Otro caso se genera cuando una persona alega tener la marca con anterioridad, oponiéndose a su registro, caso en el cual también es preciso responder por medio de un abogado. Por último, también se requerirá de un abogado si es que INAPI rechaza el registro de una marca, pues es la única forma de apelar dicha decisión.

La protección a una marca dura por 10 años, renovables por 10 años más sucesivamente al final de cada periodo. La renovación tiene un costo de 6 UTM por clase registrada.